¡Amiga! tienes una arruga? ¡no! de verdad? sí... ¿se me nota mucho? no, no te preocupí pasa piola. Eso sí-en voz baja- como consejo, no hagas tantas expresiones con tu rostro. -mirada atónita, porque ya te imaginaste vieja y con canas-.
Conversaciones de este tipo es lo que habitualmente escucho en mujeres. Al parecer, hay que estar serias, sin enojarse, porque al gruñir, también se marcan esas expresiones indeseadas, pero tampoco nos podemos reír mucho, las líneas de expresión, recalcan nuestro contorno de labios.
Cuando revisé el calendario, y me di cuenta que tan sólo quedan unas semanitas para entrar a los veintisiempre, pensé "cada día, queda menos, para que mi amiga me de esos consejos" Y es que me da hasta un poco de rabia, porque para los hombres es todo más fácil. Simplemente deben estar "bañaditos" con tal, son hombres. Me pregunto, ¿qué pasaría si las mujeres abandonáramos esas reglas de belleza comúnmente realizadas por nosotras? Que nos paseáramos despeinadas, con ropa sin combinar, y sin depilarse.
Apuesto que, ustedes los varones serían los primeros en colocarnos sobrenombres, tales como ahí va "la mujer cavernicola", "la tía cosa".Haciendo claramente, mofa "de nuestra apariencia. Para uds, todo es permitido ya que, si fuesen los varones, los despeinados, sin afeitarse y mal olientes, daría lo mismo. Mas "macho" se vería antes los ojos de la sociedad chilena (machista).
Y es que esto no es todo, después de los veintisiempre, vienen los 30 donde, no sólo las arrugas son un problema, sino que viene la fuerza de gravedad a hacer de las suyas , y es ahí cuando las grandes tiendas de belleza, se hacen millonarias, pues todas están asustadas de los efectos que puedan causarles en el cuerpo.
Reconozco que, me da un poco de temor entrar en esta "nueva etapa", porque cada día, las preocupaciones serán más. Y es que la sociedad, no te deja pasar ninguna. Más aún, si eres mujer y con defectos físicos superficiales-no ser 90-60-90 y rubia es uno de ellos-. Ojala llegue luego el día en el cual, este tipo de cosas, den lo mismo. Y los veintisiempre, sean una felicidad y no una etapa pre-traumática.
Sólo nos queda, ser felices, reírnos por doquier y soñar con que nuestras canas, tal vez sean rubias y que las cremas que están en el mercado, surtirán efecto en un futuro no muy lejano. El ser mujeres, ya es un don, el ser regias, se lleva por dentro. Por favor señores, no sean tan exigentes. Como dicen por ahí, "la belleza es actitud".
